Estudiar carreras de Relaciones Laborales
Elije de entre la lista de países donde estudiar Relaciones Laborales:
ArgentinaAustraliaCanadáEspañaEstados UnidosFilipinasIndiaItaliaNueva ZelandaReino UnidoRepública de SudáfricaEl poder de las actividades laborales y del trabajo en general es un segmento muy importante de la sociedad. De hecho, la mayoría de los gobiernos no poseen un departamento o ministerio de trabajo, para abordar los problemas relacionados con el trabajo, precisamente para no dotar a este aspecto social de mayor poder que el que ya ostenta, naturalmente.
En Inglaterra, el Partido del Trabajo goza de excelentes políticos, porque sus campañas están orientadas hacia el mejoramiento de las condiciones laborales del país y de los sectores sufragantes laborales, en particular. En Estados Unidos, por otra parte, para ser elegido como presidente, la elocuencia no basta para orientar una buena campaña, por cuanto los votantes estadounidenses son muy exigentes, especialmente con respecto de los programas centrados en mejorar la salud, disminuir los impuestos, adecuar las deducciones fiscales en una forma realista, entre muchos otros aspectos destinados a atraer a la clase obrera y popular, en general.
Remontándonos hacia hechos relevants de la historia universal, es posible apreciar que la mayoría de las revoluciones o disturbios civiles se iniciaron a partir de la existencia de trabajadores descontentos. La Revolución Francesa comenzó, porque el pueblo francés se cansó de ser la mano de obra de una estructura monárquica pródiga respecto de su propios beneficios. La estructura democrática en América, fue allanada por la guerra civil que se inició a partir de la supresión de los movimientos esclavistas y, con toda certeza, triunfó la emancipación que favoreció las condiciones actuales de este país –especialmente respecto de la democracia y el desarrollo del campo laboral.
Un avance rápido hasta el presente, nos muestra una atención social y política canalizada hacia los derechos laborales, como nunca había existido a través de la historia, en forma colectiva y universal. Este fenómeno ha impulsado la creación de un nuevo campo de estudio conocido como Relaciones Laborales, exclusivamente dedicado a promover la relación armónica de los empleadores y los empleados. Gracias al desarrollo de este campo, ningún empleado, desde el portero al gerente, puede ser despedido sumariamente, sin un motivo válido para su finiquito de funciones.
La existencia de las Relaciones Laborales, como disciplina de estudio y profesión, ha allanado el camino para la promulgación de determinadas leyes que han garantizado la protección de los trabajadores. Por ley, en la mayoría de los países civilizados, las empresas están obligadas a inscribir a sus empleados en las prestaciones de seguridad social. En los países altamente desarrollados, deben respetarse prestaciones legítimas para cada trabajador, como: Vacaciones pagadas, préstamos de sueldos y asistencia para la hospitalización –todos beneficios de los empleados, como resultado de pactos laborales, promulgación de leyes, representantes políticos indicados y una menor incidencia de huelgas y la violencia.
Sin embargo, los países del tercer mundo cuentan con una historia diferente. Los especialistas en relaciones industriales de los países del tercer mundo están más ocupados que sus homólogos occidentales. La mayoría de los empresarios locales tienden a desanimar a los sindicatos, junto a otras formas similares de organización laboral. Algunos incluso emplean a niños y adolescentes para realizar el trabajo físico duro o inapropiado, a cambio de una remuneración mínima, para favorecer la mano de obra barata -aun existiendo leyes vigentes que protegen los derechos de los niños por una parte y de los trabajadores, por otra.
Por lo general, las relaciones de trabajo son aplicadas y llevadas a la práctica por el departamento de Recursos Humanos (HRD) de cada empresa, actuando como un puente entre la dirección y los empleados. Las empresas con departamentos de recursos humanos muy desarrollados, por lo general actúan como si estuvieran separados de la misma, porque de alguna forma, su carácter toma una autoridad autonómica, que les permite proceder y funciona en forma paralela.
Los defensores, desde el punto de vista de la gestión, se aseguran de contratar a empleados que se beneficiarían con las características del empleo, asegurándose, además de que la empresa está cumpliendo con las leyes y los reglamentos que estipulan el Departamento de Trabajo y el Ministerio de cada país en particular. Cuando existen conflictos entre la dirección y los sindicatos, el desarrollo de recursos humanos actúa como intermediario para evitar un cese de las operaciones de la empresa. Cuando, realmente el asunto está más allá del poder de la Industria y de la empresa, se hace imprescindible la intervención de expertos en relaciones -los negociadores de terceros, que suelen ser funcionarios públicos o abogados.
Las Relaciones de Trabajo han recorrido un largo camino y han mejorado profundamente el nivel de interacción y comunicación entre empleadores y empleados. Aunque las Relaciones Loborales han alcanzado un grado óptimo en la última década, los expertos afirman que sólo han arañado la punta del iceberg. Más oportunidades se están abriendo debido a que las empresas son cada vez más abiertas y condescendientes frente al accionar de los sindicatos. La prueba primordial del rotundo éxito de esta profesión la encontramos en la alta demanda de los cursos están disponibles en casi todas las famosas universidades y colegios.